Estando en Dubái no podía dejar de probar una de las experiencias más alucinantes: Montarme en un vehículo 4×4 y hacer un trepidante viaje por el desierto. Sin duda, fue una experiencia impresionante y que, sinceramente asusta pero reconforta. Allí pude divisar algunos de los paisajes más impresionantes, disfrutando de la inmensidad del desierto.
Por si el viaje en todoterreno no fuera suficiente, acabamos el día en una especie de oasis en forma de centro cultural, con espectáculos en vivo, y una cena típica inmerso en un ambiente emiratí, incluyendo los camellos.
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El video fantastico, te envidio este viaje :)
Muchas gracias.